El contrato del entrenador mejor pagado del mundo, con una ficha anual neta de 20 millones de euros, se extingue en 2024. Pero en sólo cinco meses debe cumplir con el objetivo mínimo de cada curso: meter al equipo en la Champions. Con este resultado, se debió realizar un partido de desempate, el 17 de mayo de 1974, donde el equipo español se presentó totalmente desmoralizado y mermado físicamente, siendo derrotado por cuatro goles a cero.