Campos, que estaba llevando la iniciativa del juego en todo momento, inició una jugada en la que todo el equipo se volcó sobre la meta visitante, y fue él mismo quien la culminó con un disparo raso y cruzado que puso el 1-0 en el marcador y arrancó una ovación del público. El 23 de febrero, se disputó el encuentro de vuelta de los dieciseisavos de la Liga Europea de la UEFA frente a la Lazio, y dio como resultado 1-0, a favor del colchonero, sin la presencia de Radamel en el marcador.